Por: Bernardo Congote
Miembro del Consejo Internacional de Federalismo y Libertad
La nueva ministra López Montaño llama “revolución agropecuaria” a las propuestas del presidente Petro sobre el sector; luego las rebaja a “reforma agraria”.[i] Pero, los años nos muestran que probablemente no sean lo uno ni lo otro.
Citando al dictador Park de Corea del Sur, el profesor Gutiérrez acaba de recordarnos que en apenas 60 años ese país pasó de ser más pobre que Colombia a triplicar o cuadruplicar nuestro PIB.[ii]
Certeramente añade Gutiérrez que:
“… el general Park … profundizó (la reforma agraria) , complementándola con provisión de crédito rural y otras medidas, y con una vigorosa política industrial (el plan quinquenal, la promoción de los famosos conglomerados chaebol y una orientación agresivamente pro – exportadora). [iii]
Comparando lo uno con lo otro, podríamos entender por qué la propuesta de la ministra colombiana podría no ser ni “revolucionaria” ni “reformista”.
Suena a música celestial verla afirmar, por ejemplo, que “Lo que ha dicho el presidente es que vamos a comprar la tierra que siendo productiva no esté siendo utilizada”.[iv]
Pero pasar de baldíos privados improductivos a baldíos comprados por el Estado, apenas reproduciría las fracasadas experiencias de los años 80 con el INCORA (flamante monstruo politiquero que nació diseñado dizque para hacer la enésima <<reforma agraria>> y terminó en ruinas).[v]/[vi]
Si aquello no bastara, la ministra añade que: “Hay que darle (sic) tierra a los campesinos y también preparar un paquete de ayudas. Eso va a ser un reto inmenso, porque tenemos pocos recursos, pero hay la voluntad política de empezar el proceso.[vii]
Y aquí sí que conviene lanzar alertas. No hay prueba empírica alguna que desde 1936 cuando la primera reforma, hasta hoy cuando se nos viene la enésima, <<darles tierra>> o <<ayudas>> a los campesinos haya significado algo diferente a profundizar su miseria y derrochar nuestros impuestos.[viii]/[ix]
Tal como está probado en el artículo que acabamos de citar, subsidiar los minifundios sólo ha aumentado el número de pobres, ahuyentado las pocas explotaciones comerciales productivas y, por ende, otra vez echado a las cañerías nuestros impuestos. (¿Otra reforma tributaria para esto?…)
Llama la atención que ya en el XXI, todavía la ministra ignore el exitoso encadenamiento entre agricultura – industria – exportaciones que sacó a Corea del Sur de la pobreza desde los pasados años 60.
Con el agravante de que sin ir tan lejos, anticipándose a los coreanos esta misma fue defendida en los mismos 60s hasta la saciedad en Colombia por el nunca bien ponderado economista canadiense-colombiano Lauchlin Currie.[x]
Currie propuso que una política de empleo creciente de mano de obra no calificada en las ciudades vía industria de construcción, absorbería la mano de obra sobrante en los minifundios agrarios, impulsaría el desarrollo urbano aprovechando el ahorro privado y generaría grandes impulsos a las exportaciones.[xi]
Alcanzamos a ver grandes resultados en corto tiempo por los 70. Como que en apenas cuatro años, el impulso a la industria de la construcción llegó a incrementar en un millón las viviendas nuevas financiadas con el ahorro privado mediante las cuentas de ahorro UPAC.
Pero manotazos impunes sobre el Sistema UPAC, secaron las fuentes del ahorro, extinguieron el crédito a los constructores y bloquearon las expectativas exportadoras.
Con el agravante de que millares de desempleados se exiliaron en las laderas urbanas los unos, otros cayeron en las huestes de la insurgencia y los demás se regresaron a morirse pobres en los minifundios subsidiados(¡!).
¡Alerta! ¿Se nos viene otra (fracasada) «reforma agraria»?
Congótica. No sobraría advertir, al final, que la real reforma agraria de la modernidad está siendo impulsada por la biología sintética, no por subsidios ni tierras regaladas.
Congótica 2. No está lejano el momento (se habla de 2030) en que las proteínas animales (carne o leche) sean producidas en laboratorio, más saludables, de mejor calidad y más baratas.
Congótica 3. Y que, por tanto, las “revoluciones” y “reformas” que se nos anuncian con bombos y platillos arriesguen volverse, otra vez, un empobrecedor saludo a la bandera…
[i] https://elpais.com/america-colombia/2022-07-08/cecilia-lopez-la-reforma-agraria-de-petro-es-una-revolucion.html Consulta de agosto 20 2022.
[ii] https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/francisco-gutierrez-sanin/trayectorias/
Consulta de agosto 20 2022.
[iii] Ídem https://www.elespectador.com/ Consulta de agosto 20 2022.
[iv] Cit. https://elpais.com/america-colombia/2022-07-08 Consulta de agosto 20 2022.
[v] Afirmación benévola, porque buena parte de esa masa campesino ha venido a engrosar las filas de los más de treinta grupos criminales que azotan casi todas las regiones de Colombia, tal como lo plantea hoy Human Watch Rights. (“’Paz total’ de Petro…. En Diario El Tiempo, edición de agosto 20 2022, Pág. 1.4).
[vi] Añadiendo que según lo habría anunciado en otros escenarios, la misma ministra se propondría revivir el IDEMA, otro fracaso de los mismos años con las mismas pretensiones que quedó reducido a banquete politiquero pagado con nuestros impuestos.
[vii] https://elpais.com/america-colombia/2022-07-08/cecilia-lopez-la-reforma-agraria-de-petro-es-una-revolucion.html Consulta de agosto 20 2022.
[viii] https://blogs.elespectador.com/politica/bernardo-congote/acabemos-la-miseria-agropecuaria Febrero 7 2022.
[ix] Congote Ochoa, B. y Otro. (2014). “Dos hipótesis sobre el efecto que tiene en la forma de explotación agropecuaria aplicar subsidios a sistemas de riego. El caso del Alto Chicamocha (Boyacá, Colombia)”. Revista Cuadernos de Economía, 33(62), 259-295.
[x] Currie, L. (1968). Desarrollo económico acelerado. México: FCE, Páginas 183 y siguientes.
[xi] Congote, B. (1976). Articulación de un plan de desarrollo para Colombia. México: Revista Comercio Exterior, Volumen 26, Número, 2, Páginas 216 y siguientes.