Historiadores reconocen que genera discusión pero critican que solo se lo recuerde por la “Conquista del Desierto”.

Hace 100 años murió el ex presidente Julio Argentino Roca. Representante de la Generación del 80, su polémico rol al frente de la Conquista del Desierto que tuvo como ministro de Defensa durante la presidencia de Nicolás Avellaneda, parece haberlo condenado al olvido oficial.

La negativa oficial a homenajear a Roca desató diversas opiniones de historiadores e intelectuales, que consultados recordaron al general.

Para el historiador y ensayista Juan José Sebreli “la satanización de Roca es una cuestión meramente política” y cuestionó que “se hace hincapié en la Conquista del Desierto olvidando que la primera conquista del Desierto la hizo Juan Manuel de Rosas, a quien hoy se reivindica”.

Sin embargo, Sebreli, que destacó que Roca “legó la educación y la inmigración, las dos claves de la Argentina moderna”, puso el eje más allá. “Se maltrata en general a toda la Generación del 80, pretenden demostrar que no existió”.

Eduardo Lazzari, titular de la Junta de Estudios Históricos del Buen Ayre (JEHBA) cuestionó la proscripción de Roca, que atribuyó a que “en estos últimos 20 años ha surgido un falso indigenismo con la idea de derribar su imagen”.

“La Argentina transita un camino de demolición de su historia porque es la única forma de aceptar el presente y a esta actualidad decadente sin rendir cuentas. Porque, en definitiva, la Argentina no ha cumplido con los sueños de sus padres constitucionales”, sostuvo. Como presidente, sin temor a equivocarnos, podemos decir que estamos ante el mayor estadista que tuvo la Argentina en su historia”, agregó Lazzari que recordó, sin embargo, que “Roca fue el líder político excluyente entre 1880 y 1910 no siendo popular”.

Más moderado, el historiador y escritor Mario Pacho O’Donnell se refirió a los “claroscuros” de Roca. “No se puede tener una visión tan sesgada de Roca, como decir solamente que fue un genocida. Terminó con el predominio de la oligarquía porteña en la política”.

O’Donnell defendió la Conquista del Desierto encabezada por Roca. “Si no fuera por él, la Patagonia hoy no sería Argentina. Su ocupación fue una decisión geopolítica muy acertada”. O’Donnell enmarcó el accionar de Roca dentro de un tiempo “de predominio del pensamiento positivista que le adjudicaba a los blancos una superioridad en relación a otras razas”.

No obstante, para O’Donnell “lo que sí se puede criticar es la forma en la que se llevó cabo, dado que se encaró la campaña contra una sociedad prácticamente desarmada y de una forma excesivamente violenta y también la distribución que se hizo de las 42 mil leguas conquistadas, que fueron a parar a la oligarquía porteña”.

Fuente: Clarín