Por Bernardo Congote

Miembro del Consejo Internacional – FyL

Con De la Rúa funcionó el helicóptero. Y no se descartaría hipótesis del helicóptero contra “Albert”, piloteado por “Tina”, por supuesto[i]. Pero el helicóptero resultaría inocuo para las maquinaciones K. La versión remozada del “vamos por todo” no necesitaría de helicópteros; se desperdiciaría combustible…

“Tina” está mostrando su nueva táctica. Consiste en lanzar decenas de drones, invisibles, silenciosos y perversos contra el Estado, como corresponde a su personalidad delictiva. Cada uno de ellos piloteado por sus sirvientes, los está enviando uno por uno hacia el Poder Judicial, el Legislativo y el Ejecutivo. -¡Pero si ya lo sabíamos!-.

La táctica de los drones tiene como estrategia lograr el vaciamiento del Estado argentino. Como De la Madrid lo ratificó hace poco hablando con Leuco en TN -y lo tiene probado por escrito además-  lo que se vino sobre la Argentina no fueron Chávez ni Maduro: ¡Se vino Santa Cruz!

La Argentina, concentrada históricamente en el aparato bonaerense, habría caído en el vicio de convertir el AMBA en su ombligo sociopolítico. Y mirándose el ombligo por decenios, habría despreciado el impactante reto de su rico y amplio organismo federal. La provincia nunca habría existido para el ombligo político argentino (Pero también a la inversa: ¡Dos Estados, un País?) [ii].

Por ello los Kirchner en Santa Cruz llegaron, por ejemplo, a modificar dieciocho (18) veces -se dice- la ley electoral santacruceña para reelegirse ilimitadamente; prueba de ello, que distraído el matrimonio en las redes bonaerenses, Alicia se mantuvo gobernadora durante el régimen de Cambiemos.

Santa Cruz sería la prueba reina de la estrategia del karakol. Esa provincia, en un proceso que dataría de varios quinquenios atrás, habría sido vaciada de toda señal democrática o republicana. De todo aquello que significara el manejo austero del presupuesto; de todo lo que significara el respeto o siquiera la existencia de división de poderes; o de algo que se pareciera a la justicia.

La cartilla estaba escrita a la vista de todos los argentinos, pero sólo los santacruceños la conocían y algunos la denunciaban sin éxito alguno. Gracias a que Buenos Aires sólo se mira en su propio ombligo hasta hace poco se contabilizaban en Río Gallegos cuarenta y cuatro (44) procesos de corrupción el robo de multimillonarios recursos públicos[iii].

Entonces: ¿Qué le podrían importar a “Tina” una decena de causas abiertas en Comodoro Py? Apenas lo necesario para enviarle dos drones que vacíen el Poder Judicial central: el uno, buscando que las Cortes se rellenen con simpatizantes de la Cámpora y, el otro, que los despachos judiciales queden vacíos de todo juez que tenga por delito alguna vocación democrática.

El vaciamiento camina también lanzando drones expropiadores de empresas-símbolo como Vicentin. Y ¡ojo! Muy pronto otros drones serían lanzados para expropiar al periodismo libre[iv]. Que es, sin duda, el peor enemigo de la estrategia y el único capaz de identificar a los drones silenciosos y perversos de la mafia K.

También se podría ratificar ahora, por debajo del humo producido por el Covid-19, que en diciembre 2019 no se firmó la llegada del chavismo o del madurismo sino la consolidación del kirchnerismo santacruceño.

Pero una pregunta por resolver sería: ¿a qué tipo de político moderno le interesaría una Argentina vaciada política, económica, judicial y legislativamente?

¿Cuál sino una mente enajenada podría tener por objetivo apoderarse de los hilos de una sociedad desierta? ¿Vaciada? Pues bien; ello resultaría coherente en mentalidades sicóticas de las que, por supuesto hay pruebas no sólo en el Sur sino también en los Maduro, Chávez, Ortega, Uribe, Trump o Bergoglio.

El problema de la estrategia del karakol consistiría en que la enfermiza concepción del poder kirchnerista en cabeza de la enajenada Cristina (y aceptada por una enajenada Argentina)[v], no operaría con base en los mismos parámetros de los millones de argentinos todavía esperanzados en construir una República.

No. A los K las bastaría con llevarse a toda la Argentina por delante, inclusive a riesgo de su propia suerte. A ellos no les importaría administrar presupuesto alguno, resolver conflicto judicial alguno -propio o ajeno- y organizar un Estado medianamente funcional. ¡Ya probaron por 20 años que no saben hacerlo!

La patología K es, por tanto, necrófilo-destructiva[vi]. Es la del arrasamiento, sin importar si ese fuego les consume a ellos mismos. Su odio intrínseco es de tal magnitud que, con tal de acabar con el enemigo esquizoide que han identificado como ¡la otra mitad de los argentinos!, los K están dispuestos a apoderarse de una Argentina destruida: endeudada, empobrecida, enferma y cadavérica.

A ellos no les importaría gobernar una Argentina que compita con los mercados globales, que lance a sus jóvenes como ciudadanos del mundo o que alimente al resto del planeta. Estos, para ellos, son parámetros retrógrados ( ).

Su progresismo sería endofágico destructivo porque hallaría placer en disfrutar el olor pestilente de las cloacas, la podredumbre de las basuras, los caminos llenos de delincuentes, la obra pública destruida y la miseria andrajosa por doquier.

Una solución del acertijo: Cristina es hoy el propietario de un inmueble ocupado por argentinos republicanos y no republicanos. Odiando a los primeros, ella decide destruirlo pero los que no lo aceptan se van mientras los otros se quedan creyendo que lo mejor es seguir viviendo en la miseria. Al final, la Argentina que conocemos desaparece y queda otra en pie. Pero los que huyen, acuerdan dejar pintado sobre la fachada este testimonio: ¡Ahí tienen su hijueputa casa pintada!


[1] El cineasta Sergio Cabrera dirigió y produjo en 1993 La Estrategia del Caracol, película ganadora en Berlin y en Biarritz y ponderada como la mejor del cine colombiano hasta el presente. Su argumento muestra a decenas de habitantes de una humilde casona colonial localizada en la gran ciudad que, viéndose acosados por el propietario del inmueble para que lo desocupen y se lo dejen pintado, deciden la noche anterior al desalojo policial desocuparla pero no sólo llevándose todas sus cosas sino destruyendo el inmueble por dentro de modo que, cuando llega el propietario al día siguiente, se encuentra con la fachada del edificio pintada con la icónica frase: AHÍ TIENEN SU HIJUEPUTA CASA PINTADA.

[2] https://www.federalismoylibertad.org/el-peculiar-gobierno-de-albertina/

Feb 13 2020

[3] https://www.federalismoylibertad.org/el-antiguo-federalismo-aleman-y-los-actuales-abismos-argentinos/  Septiembre 20

[4] https://www.lanacion.com.ar/politica/santa-cruz-mapa-provincia-convulsionada-investigaciones-nid2166030

Agosto 2018

[5] https://www.lanacion.com.ar/politica/cristina-volvio-encender-hoguera-periodistas-nid2378649

Junio 13 2020

[6] Último tango en Cuba, disponible en www.federalismoylibertad.org/agenda/articulos

Marzo 2019

[7] https://www.federalismoylibertad.org/es-el-narcisismo-estupido/

Mayo 2019


*La imagen de portada pertenece a  Morenometal – Trabajo propio, CC BY-SA 3.0 : https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=29174643